Jue. May 16th, 2024

España y el futuro global de las izquierdas – Juan de Dios Andrade

El resultado de las elecciones en España significa un mensaje para los que están en el poder. Los electores han rechazado los excesos ideológicos y las decisiones absurdas que se han tomado desde la cúpula de gobierno. Pedro Sánchez decidió adelantar las elecciones como una forma de evitar el desastre total. Pero ¿será suficiente? Desde la izquierda humanista, también le hacen llegar un programa autocrítico como principio de solución, ¿Qué hará el presidente español? El desenlace de la lucha por el poder en España ¿será lo que marque el derrotero de las izquierdas a escala global?

CONfines Políticos

3 de junio de 2023

El 28 de mayo pasado, la maquinaria electoral de las izquierdas españolas crujió en las urnas. Prácticamente perdieron todo su poder territorial, lo que obligó a Pedro Sánchez a adelantar las elecciones para el 23 de julio, originalmente fechadas en diciembre. El descalabro fue severo y dicen que “cuando todo está perdido, está todo por ganar”, y el presidente español ha tenido que jugar todo a una sola carta…

Pedro Sánchez no tenía opción. Esperar hasta diciembre implicaba el riesgo de un oleaje al interior del espectro de izquierdas, culpándolo de la debacle. Asimismo, la falta de acuerdos electorales y programáticos entre los aliados del PSOE abonaría a la fractura y naufragio de su gobierno…

Pero ¿adelantar las elecciones bastará para neutralizar la percepción de ‘fin de ciclo’ en la opinión pública? Esa es la pregunta clave. Porque ahora se trata del poder y no de otra cosa…

La fecha es importante: hacia el 23 de julio muchos españoles estarán de vacaciones con una temperatura de alrededor de 40 grados, lo que revela un esfuerzo desesperado por parte de Sánchez tratando de inhibir la participación ciudadana en las urnas y en las mesas electorales…

Sin embargo, todo parte de cómo se interprete lo que acaba de pasar en los comicios de mayo…

Las lecturas de las elecciones

Sin duda, la peor parte la sacó Unidas Podemos. Son las consecuencias de una agenda ideológica extremista que no cesó con la salida de Pablo Iglesias de la vicepresidencia. Por fuera del gobierno, Iglesias intenta sostener las posiciones de la ultraizquierda y recuperar el liderazgo perdido, aunque la ‘voz’ de los electores fue clara y contundente…

Hoy, tanto en el PSOE de Sánchez como en Sumar de Yolanda Díaz (vicepresidenta segunda) saben que el ‘compañero de viaje’ podría tener los días contados en el poder o, por lo menos, quedar reducido al mínimo en su margen de negociación…

El PSOE cayó poco, la quiebra electoral está en los sectores ‘ultra’ de los aliados, incluyendo facciones nacionalistas y separatistas. A estas alturas, ya se sabe que en La Moncloa necesitan que alguien pague por lo ocurrido, con tal de evitar que la euforia de cambio tire del poder a Pedro Sánchez. Unidas Podemos ha dejado un espacio vacío que otros deben apresurarse a llenar, lo que significa que determinadas candidaturas serán rechazadas rumbo al 23 de julio, no digamos ciertos puntos del programa a pactar…

Es evidente que Yolanda Díaz tiene en la mira a Ángela Rodríguez Pam, Isa Sierra y Pablo Echenique, lo que quiere decir que se apresta a ‘rasurar’ de la lista a los incondicionales de Irene Montero y Pablo Iglesias. Pam y Sierra son gente de Montero; Echenique es alfil de Iglesias…

Irremediablemente, lo anterior traerá aparejada una serie de confrontaciones regionales y ajuste de cuentas en Cataluña, Valencia, Galicia, Andalucía y en la mismísima Madrid, en donde, al más puro estilo nazi, ya se afilan las armas blancas para ‘la noche de los cuchillos largos’…

En vano se desgañita Pablo Iglesias en sus publicaciones, afirmando que cebarse en Unidas Podemos no garantiza el triunfo en las urnas…

Los líderes de la izquierda humanista llaman a deslindar las causas femeninas de la ideología de género, de la mentalidad ‘queer’ y del lenguaje inclusivo. Especialmente, dice esta posición socialista, es urgente abandonar ‘la agenda posmoderna’, para la cual ser mujer es un ‘sentimiento’ y no un ‘hecho biológico’

Juan de Dios Andrade

La confrontación por la agenda

El éxito del Partido Popular y de Vox no se debió tanto a las candidaturas que postularon, sino a la estrategia seguida: convertir las elecciones en un plebiscito contra el gobierno de Pedro Sánchez y los resultados están a la vista. De llegar así al 23 de julio, Sánchez será echado del poder…

Por eso, al presidente de España le urge cambiar el enfoque, buscando que los comicios que vienen sean una elección polarizada entre ‘la agenda progresista’ y ‘la agenda de la ultraderecha’, aunque se antoja muy difícil que pueda librarse de haber sido reprobado por los electores el 28 de mayo, ni del ‘canibalismo’ en ciernes en el abanico electoral de izquierdas…

El escenario no podía ser más enredado: aunado al mal resultado en los sufragios, al forcejeo por ver quién se queda con el espacio de Unidas Podemos y a las complicadas negociaciones con la pléyade de socios del PSOE (a menos de dos meses de las votaciones adelantadas y a menos de una semana del registro de las listas de formaciones y coaliciones), está el hecho de que España asumirá la presidencia de turno de la Unión Europea a partir del 1 de julio…

La presión de los populares es de tal magnitud que el Gobierno español ha pedido aplazar el discurso que Pedro Sánchez debía pronunciar ante la Eurocámara el día 13 del próximo mes…

Adelantar las elecciones que iban a ser en diciembre, estropea el panorama geopolítico de España y, de perder las elecciones, sería otro el que pronuncie el discurso aplazado. Directamente relacionado con lo anterior, está la desconfianza de Joe Biden hacia Sánchez. El mandamás norteamericano mira con recelo el que Pedro presida la UE en medio de la invasión rusa a Ucrania y el desafío de China, y, sin duda, tratará de estorbarle en lo que se pueda…

Trasladar las elecciones a julio le está dando a Biden la oportunidad deseada…

Tan severo fue el golpe recibido el 28 del mes pasado, que Sánchez ha retomado un proyecto que se había descarrilado durante su visita a la Casa Blanca: convertirse en el relevo de Jens Stoltenberg al frente de la OTAN (cuyo mandato prorrogado termina el 30 de septiembre). Como lo vimos, el 12 de mayo, el presidente español habló ante los medios sin la compañía de Joe Biden, en una situación muy distinta a la de Emanuel Macron. Fue una clara descalificación a los planes de Sánchez respecto a la OTAN…

Lo peor fue que, después del encuentro con los medios de comunicación, la Casa Blanca ‘le corrigió la plana’ a las declaraciones del gobernante español…

Volviendo al tema de las próximas votaciones, lo que Pedro Sánchez pretende es realizar ‘el juego imposible’: la polarización entre ‘la agenda progresista’ y ‘la agenda de la ultraderecha’ podría mandarlo de regreso al escenario del plebiscito que tantos frutos rindió al PP y a Vox…

Los españoles rechazaron en las urnas precisamente a los adalides de la agenda posmoderna. Aferrarse a ‘la agenda progresista’ podría ser una trampa y el modo más directo de asegurar una nueva derrota y de cancelar la viabilidad del gobierno de izquierdas

Juan de Dios Andrade

Izquierda humanista y agenda progresista

Está ocurriendo lo impensable hace unos días. Las vertientes de la llamada izquierda humanista y la izquierda intelectual e ‘inteligente’, le recuerdan a Pedro Sánchez que lo ocurrido no fue un ‘problema técnico’. No será cuestión de polarizar dos agendas con tal de mantenerse en el poder, sino de hacer una lectura acertada del mensaje de los electores, porque lo de cobijarse en la agenda progresista podría ser la estocada final para el gobierno de izquierdas…

Basta ver las opiniones que han vertido los representantes de este vasto movimiento para darse cuenta que piden dar por terminada la exclusión entre la búsqueda de la igualdad y el libre mercado y la generación de riqueza. Digo que algunas propuestas eran impensables antes del fracaso electoral, porque apuntan a una economía de mercado con sentido social. Sí, leyeron bien. ‘Ya basta’, dice la izquierda humanista, del populismo gastalón, improductivo e inflacionario…

Por eso, sostienen, es crucial abandonar la idea de que todo se debe financiar con impuestos y deuda, para centrarse en contar con empresas competitivas y generación de riqueza…

En segundo lugar, llaman a deslindar las causas femeninas de la ideología de género, de la mentalidad ‘queer’ y del lenguaje inclusivo. Especialmente, dice esta posición socialista, es urgente abandonar ‘la agenda posmoderna’, para la cual ser mujer es un ‘sentimiento’ y no un ‘hecho biológico’…

La verdad es que me ha asombrado la lucidez del diagnóstico: si el PSOE perdió votos, a sus socios les fue peor. Es decir: los españoles rechazaron en las urnas precisamente a los adalides de la agenda posmoderna. Aferrarse a ‘la agenda progresista’ podría ser una trampa y el modo más directo de asegurar una nueva derrota y de cancelar la viabilidad del gobierno de izquierdas…

Del mismo modo, el socialismo humanista retoma un asunto pendiente desde el término de la Segunda Guerra Mundial y de la pesadilla totalitaria: hay que marcar distancia y condenar las dictaduras, autoritarismos y totalitarismos al margen de su signo ideológico, urgiendo a rechazar el modelo cubano y venezolano. Dicho de otro modo: ya es hora de poner fin a los sueños revolucionarios y a las violaciones a los derechos humanos…

España, como todas las potencias de la Historia, ha tenido aciertos y desaciertos, ha hecho cosas nobles y buenas, pero también ha cometido excesos e injusticias. El problema es que España parece ser la única o de las pocas naciones que se vuelven contra sí mismo y las izquierdas no han sido ajenas a ese contrasentido

Juan de Dios Andrade
¿Habrá un futuro inmediato?

Cultura e identidad

Un aspecto importante de esta revisión y autocrítica de la izquierda humanista, estriba en liquidar el antiespañolismo que campea en las filas socialistas y en sus socios. Es absurdo que se pretenda respetar otras culturas (empezando por las conquistadas por el otrora imperio español), despreciando la propia y la identidad nacional. Es toral desmentir y abandonar la idea de que la cultura española y el progreso son excluyentes entre sí…

No podía ser de otra manera: lo anterior implica distanciarse de la ideología nacionalista y separatista. No tienen empacho en afirmar que ambas son enemigas de la democracia, del marco constitucional y de la convivencia…

Por increíble que parezca, también proponen replantear el tema de la memoria histórica y democrática. Hay que eliminar lo que quede del franquismo y hacer justicia a las víctimas y a sus deudos, sin olvidar que en las filas republicanas igualmente hubo represión y crímenes que exigen por lo menos justicia histórica…

De paso, este tipo de izquierda busca derribar un mito: la República se derrumbó por culpa de los extremismos de diferente signo ideológico y no sólo porque el franquismo haya triunfado…

¿Saben lo que eso significa? Los líderes intelectuales de la izquierda humanista desean cambiar la mentalidad que ha imperado en el socialismo español y dejar atrás las polarizaciones…

España, como todas las potencias de la Historia, ha tenido aciertos y desaciertos, ha hecho cosas nobles y buenas, pero también ha cometido excesos e injusticias. El problema es que España parece ser la única o de las pocas naciones que se vuelven contra sí mismo y las izquierdas no han sido ajenas a este contrasentido…

Eso explica el éxito logrado por la ‘cultura de la cancelación’ en España, que en realidad es fanatismo ideológico. En lugar de trata de entender su propio pasado y juzgarlo con actitud crítica, pero sana, se ha procedido a mutilarlo, tergiversarlo o de plano a borrarlo…

Lo que Pedro Sánchez pretende es realizar ‘el juego imposible’: la polarización entre ‘la agenda progresista’ y ‘la agenda de la ultraderecha’ podría mandarlo de regreso al escenario del plebiscito que tantos frutos rindió al PP y a Vox

Juan de Dios Andrade

El pasado no se supera ni se hace justicia derribando estatuas, exhumando restos o cambiando el nombre de las calles, mucho menos eliminando páginas de la Historia…

Para estos sectores, las izquierdas deben abandonar toda posición extremista que conducen al odio, al insulto y a la violencia…

De insistir Pedro Sánchez en polarizar dos visiones de España, aunque mantuviera el poder, el precio podría ser muy alto. Pero también es muy alta la posibilidad de perder el cargo al cerrar los ojos al mensaje que le han enviado los electores…

Su intención de montar un escenario de crispación, polarización y confrontación está tan ‘cantado’ desde ahora, que en el PP y en Vox han surgido voces que sugieren no pactar ni espacios ni programa, sino que simplemente se apoye a los ganadores de las pasadas elecciones para neutralizar la estrategia de Sánchez, puesto que ya no habría una ‘agenda de ultraderecha’…

No hay duda de que lo que acaba de ocurrir en España y lo que podría pasar el 23 de julio, es el centro de atención de todas las posiciones ideológicas y políticas a lo largo y ancho de Europa, pero también en el ámbito global y quizás se convierta en un ‘antes’ y un ‘después’ en el futuro global de las izquierdas…

Hasta entonces…

Correspondencia: confinespoliticos@gmail.com